viernes, 1 de marzo de 2013


SUBRAYADO A LÁPIZ: frédéric beigbeder - 13,99 Euros

Novela cruel, panfleto insolente y alegato contra la manipulación consumista, 13´99 euros se convirtió en un auténtico fenómeno de masas en Francia, uno de los mayores best-sellers de los últimos años. Esta novela describe el maravilloso mundo de la comunicación moderna: un mundo en el que se gastan miles de millones para despertar entre personas que no pueden permitírselo el deseo de comprar cosas que no necesitan. Es un libro sobre nuestra sociedad, la vuestra, la mía, la que yo mismo contribuí a forjar durante mis diez años de presencia en las agencias de publicidad, la que todos hemos dejado crecer por despecho.

"Esta noche he soñado que me ahogaba. Me he visto a mí mismo hundiéndome, acariciando las rayas, con los pulmones llenos de agua. A lo lejos en la playa, una hermosa mujer me llamaba. No podía responderle porque tenía la boca llena de agua salada. Me ahogaba pero no pedía auxilio. Y, a mi alrededor, todo el mundo hacía lo mismo. Todos los bañistas se hundían sin pedir auxilio. Creo que ha llegado el momento de dejarlo todo, ya que no sé cómo mantenerme a flote. Todo es provisional y todo se compra. El hombre es un producto como cualquier otro, con fecha de caducidad. Ésta es la razón por la cual he decidido jubilarme a los treinta y tres años. Dicen que es la edad ideal para resucitar."

"Me llamo Octave y llevo ropa de APC. Soy publicista: eso es, contamino el universo. Soy el tío que os vende mierda. Que os hace soñar con esas cosas que nunca tendréis. Cielo eternamente azul, tías que nunca son feas, una felicidad perfecta, retocada con el Photoshop. Imágenes relamidas, música pegadiza. Cuando, a fuerza de ahorrar, logréis comprar el coche de vuestros sueños, el que lancé en mi última campaña, yo ya habré conseguido que esté pasado de moda. Os llevo tres temporadas de ventaja, y siempre me las apaño para que os sintáis frustrados.(...) En mi profesión, nadie desea vuestra felicidad, porque la gente feliz no consume."

"No existe modo alguno de escapar. Todos los cerrojos están echados, entre las más amplias de las sonrisas. Os tienen atrapados con créditos que hay que devolver, plazos mensuales, alquileres que pagar. ¿Sentís un impulso de protesta? Millones de parados esperan para ocupar vuestro lugar. Protestad tanto como queráis, Churchill ya encontró la respuesta: dijo es el peor sistema con excepción de todos los demás. El que avisa no es traidor. No dijo el mejor sistema; dijo el peor."

"De noche al regresar a mi gigantesco apartamento, a veces me costaba conciliar el sueño pensando en los indigentes sin hogar. En realidad era la coca lo que me mantenía despierto. Su sabor metálico me subía a la garganta. Me masturbaba en el cuarto de baño antes de tragarme un Stilnox. Me despertaba hacia el mediodía. Ya no tenía mujer. Creo que en el fondo, solo deseaba hacer el bien a mi alrededor. No fue posible por dos razones: porque me lo impidieron, y porque abdiqué. Las personas movidas por las mejores intenciones siempre son las que acaban convirtiéndose en monstruos. Hoy sé que nada va a cambiar, es imposible, es demasiado tarde. No se puede luchar contra un adversario omnipresente, virtual e indoloro. Contradiciendo a Pierre de Coubertain, yo diría que en la actualidad lo importante es no participar. Hay que desaparecer como Gauguin, Rimbaud o Castaneda, eso es todo. Marcharse a una isla desierta, cultivar tu plantación de marihuana esperando únicamente estar muerto cuando llegue el fin del mundo. Las marcas han ganado la World War III contra los humanos."

"(...)la gran pregunta de este siglo es ésta, en nuestro mundo aterrorizado por el paro y organizado en el culto al trabajo: ¿POR QUÉ TE HAS DESPEDIDO?.(...) Luchamos para alcanzar la categoría CI (Contrato Indefinido). Y si abandonamos nuestro trabajo, en cualquier momento, allí, en la isla salvadora, entre putas con cocaína hasta las cejas, correremos el riesgo de ver rebotar sobre la playa una enorme bola blanca, encargada de hacernos regresar al despacho vociferando: ¿POR QUÉ TE HAS DESPEDIDO?"

"Al principio la tomaste sólo para probar, de manera ocasional, más adelante para sentirte un poco más canalla los fines de semana. Más tarde, para intentar volver a divertirte, entre semana. Y finalmente, te olvidaste de que servía para divertirse, te limitaste a tomarla cada mañana para quedarte igual, y te entran ganas de cagar cuando la cortan con laxante, y se te irrita la nariz cuando la cortan con estricnina. Pero no te quejas: si no esnifaras, te verías obligado a hacer puenting enfundado en un traje de color verde fluorescente, o a patinar con unas grotescas rodilleras, o a practicar el karaoke en un restaurante chino, o el racismo con unos skinheads, o la gimnasia con viejos adonis, o las quinielas en solitario, o el psicoanálisis con un diván, o el póquer con unos fulleros, o Internet, o el sadomasoquismo, o un régimen de adelgazamiento, o el whisky de apartamento, o la jardinería, o el esquí de fondo, o la filatelia urbana, o el budismo burgués, o el multimedia de bolsillo, o el bricolaje en grupo, o las orgías anales. Todo el mundo necesita actividades para, en teoría, desestresarse, pero te das perfecta cuenta de que, en realidad, la gente no hace más que defenderse."

"Para ti no existe nada más romántico que ir de putas. Sólo los seres realmente sensibles necesitan pagar para no arriesgarse a sufrir."

"Pasados los treinta, todo el mundo se blinda: después de algunas decepciones amorosas, las mujeres rehuyen el peligro, salen con viejos imbéciles que las tranquilizan; los hombres ya no desean querer, prefieren tirarse a lolitas o a putas; todo el mundo se protege con un caparazón; uno no quiere volver a sentirse nuca más ridículo ni desgraciado. Echas de menos la edad en el que el amor no causaba dolor. A los dieciséis años, salías con chicas y las dejabas o ellas te dejaban a ti sin problemas, en dos minutos, asunto liquidado. ¿Por qué más adelante todo pasó a ser tan importante?"

"En tu trabajo circulan muchas informaciones: así es como accidentalmente te enteras de la existencia de lavadoras irrompibles que ningún fabricante se atreve a poner en el mercado; de que un tipo inventó unas medias que no sufren carreras pero que una importante marca de pantis le compró su patente para destruirla; de que el neumático no pinchable permanece cerrado bajo llave (a costa de miles de accidentes mortales cada año); de que el lobby del petróleo hace todo lo que está en sus manos para retrasar la expansión del automóvil eléctrico; de que incluso el dentífrico es un producto inútil, ya que toda la higiene dental radica en la acción de cepillárselos;(...) de que el papel de aluminio está más contaminado que el amianto; de que la fórmula de las cremas solares no ha variado desde la guerra, pese al recrudecimiento de los melanomas malignos; de que las campañas publicitarias de Nestlé para distribuir leche en polvo entre los recién nacidos del Tercer Mundo han supuesto millones de muertos (los padres mezclaron el producto con agua no potable)."

"Con todas estas cosas que te pertenecen, y la vida confortable que llevas, lógicamente estás obligado a ser feliz. ¿Por qué no lo eres? Por qué hundes sin cesar tu nariz en la farlopa? ¿Cómo se puede ser infeliz con 2 millones de euros en la cuenta bancaria? ¿Si tú estás abajo de todo, entonces, ¿quién está arriba?"

"Durante la ausencia de Octave, Odile fue contratada como becaria en prácticas y redactora. Sólo le gustan el dinero y la fama, pero finge ser una ingenua. Todas las chicas de hoy hacen lo mismo: mantener la boca entreabierta y los ojos embobados como Audrey Marnay en una serie fotográfica de Terry Richardson. En la actualidad el colmo del arribismo consiste en fingir inocencia."

"El problema del hombre moderno no radica en su maldad. Al contrario, en general, y por razones prácticas, prefiere ser bueno. Simplemente odia aburrirse. El aburrimiento le horroriza, cuando en realidad no existe nada más constructivo y saludable que una buena dosis de cotidiana de tiempo muerto, de instantes mortalmente aburridos, de muermo intenso, solo o en compañía. Octave lo ha comprendido: el auténtico hedonismo es el aburrimiento.(...) El mundo es irreal, salvo cuando es mortalmente aburrido."

"Y ya está, te besa por última vez y tú dejas escapar su grácil muñeca. Dejas que se vaya porque tú dejas que todo el mundo se vaya. La dejas escapar hacia la carrera de superstar que todos conocéis. Un segundo después de que haya cerrado la puerta, empieza la nostalgia de todos los segundos precedentes."

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